Al término del partido entre el Real Madrid y el Celta de Vigo en el Santiago Bernabéu, el técnico gallego Carlos Carvalhal se acercó a Eder Militao para pedirle su camiseta.
Debido a que ocurrió en el campo y no en el vestuario o el túnel, la escena llamó la atención.
El entrenador se excusó en la rueda de prensa posterior al partido, explicando que era una petición de su hijo.
"Sé que no se ve muy bien que un entrenador recoja la camiseta de un jugador en el campo, pero no me importa", dijo. "He pedido dos camisetas en la vida... Una a Peter Cech del Arsenal y ahora a Militao. Y lo hice porque mi hijo me lo pidió".