La decisión final sobre el tratamiento al que se someterá Arda Guler para solucionar su problema de rodilla ya está tomada. Tanto el Real Madrid como el entorno del jugador coinciden en que la mejor solución es pasar por el quirófano y descartar definitivamente un tratamiento conservador.
El nuevo jugador del Real Madrid sufrió una lesión en el menisco durante un entrenamiento durante su gira por Estados Unidos, y el club hizo el anuncio el pasado 29 de julio.
La rodilla derecha del jugador sufrió una rotura parcial del menisco interior, lesión que prácticamente todos los médicos aconsejan operar.
La práctica totalidad de los especialistas consultados por el jugador y el cuerpo médico del club coincidieron en que la cirugía era la vía más segura.
Las partes inicialmente acordaron un tratamiento conservador, pero el desarrollo es lento y no ofrece garantías a largo plazo.
Una vez recogidos todos los informes y con la presencia del cuerpo médico del club en Valdebebas tras volver de la gira, se tomó la decisión de operar.